Mantenimiento: ¿gasto o inversión?
Muchas empresas incluyen las actividades de mantenimiento como un gasto dentro de sus estructuras de costos, pero veámoslo más como una inversión.
Poco a poco ha venido surgiendo la idea de invertir en mantenimiento, pero en gran medida eso se limita a grandes empresas o aquellas ubicadas en países “desarrollados”. En nuestros países “no desarrollados” el mantenimiento así como la prevención de riesgos son vistas como gastos que deben ser evitados a toda costa ya que disminuyen las ganancias. Pero hay excepciones: ¿Qué sería del Canal de Panamá sin mantenimiento?, por dar un solo ejemplo; más de cien años de funcionamiento continuo y ejemplar que muestran al mundo que en países del “tercer mundo” o “no desarrollados” si se puede. Ojalá las empresas privadas siguiesen ese ejemplo y tomen al Mantenimiento como una inversión.