Prevención: Contaminación alimentaria
Independientemente de que seamos o no los encargados de la alimentación de nuestra familia, debemos estar pendientes continuamente de la calidad y condición de todos los alimentos que son ingeridos por nuestros seres queridos, por lo que tenemos que conocer al enemigo:
LA CONTAMINACIÓN ALIMENTARIA.
“Se define como contaminación alimentaria la presencia de cualquier materia anormal en el alimento que comprometa su calidad para el consumo humano”
“Se calcula que unas 48 millones de personas (1 de cada 6 estadounidenses) se enferman cada año por enfermedades transmitidas por los alimentos, de acuerdo con datos recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Aproximadamente 128,000 son hospitalizados y 3,000 mueren cada año.” (www.intedya.com)
Existen tres tipos de contaminación alimentaria, según el contaminante:
1.- Contaminación Biológica: viene de organismos vivos ya sean microscópicos o no. Pueden crecer en el alimento y muchos de ellos son peligrosos para la salud. Ejemplo: bacterias, virus, hongos y parásitos.
2.- Contaminación Química: se da por la presencia de determinados productos químicos en los alimentos, que pueden resultar nocivos o tóxicos a corto, medio o largo plazo. Pueden ser toxinas naturales provenientes de los animales, ambientales provenientes del medio ambiente y que pasan al alimento por malas prácticas de manipulación, agrícolas como químicos, plaguicidas o bacterias provenientes de los sembradíos y los provenientes de los envases por mala calidad de éstos.
3.- Contaminación Física: es cualquier objeto presente en el alimento y que no deba encontrarse allí, y sea susceptible de causar daño o enfermedad a quien lo consuma.
¿Qué hacer para garantizar la calidad de los alimentos?
Tenemos que dividirlo en dos partes: alimentos preparados fuera del hogar y alimentos preparados en casa. Tenemos muy poco control sobre lo que ingerimos en la calle por lo que la medida más sensata de precaución es limitar la adquisición y consumo de alimentos preparados fuera del hogar a lugares de comprobada calidad alimentaria, donde visualmente se vean limpios tanto el establecimiento como el personal. Nunca adquirir o consumir alimentos en puestos callejeros que obviamente no posean facilidades de limpieza como agua corriente. Es poco lo que podemos hacer, más que seleccionar bien donde comemos.
En cuanto a los alimentos preparados en casa debemos ser exigentes al momento de comprar los ingredientes, buscando siempre supermercados o comercios que visualmente se vean limpios. Seleccionar los alimentos comprobando su estado físico descartando aquellos que tengan cualquier deterioro. Otra medida sensata es adquirir la costumbre de ser clientes de establecimientos con los cuales no hemos tenido problemas.
Una vez adquiridos los productos alimenticios, se debe mantener lo que se llama la “cadena de frío” que no es más que mantener los alimentos lo más cercanos a la temperatura en los que los adquirimos, si estaba refrigerado no debemos dejar que el mismo llegue temperatura ambiente por lo que debemos procurar ir del supermercado directamente a casa luego de la compra y procesar inmediatamente los productos al llegar, refrigerando o congelando los que lo requieran. En cuanto a los productos que deben ser congelados como carnes, una buena idea es limpiarlos al llegar, porcionándolos en recipientes con la cantidad adecuada a los miembros de la familia, de manera de solo descongelar posteriormente los alimentos que van a ser consumidos cada día, conservando en óptimas condiciones el resto. Los alimentos que van al congelador deben estar perfectamente envueltos e identificados con el contenido, cantidad de porciones y fecha de envasado.
La limpieza es fundamental tanto en el momento de la compra como en el procesamiento de los alimentos y la completa cocción de aquellos que por sus características lo requieran como el pollo y el cerdo.
En nuestras manos está el mantener la seguridad alimentaria de nuestra familia, pero con un poco de criterio, sentido común y dedicación estoy seguro que lograremos nuestro objetivo.